60+1 el pequeño gran museo de Ancón

60+1
El pequeño gran museo de Ancón

Artistas de la colección:
Rodolfo Abularach, Eduardo Agustine, Brooke Alfaro, Olga Amaral, Per Anderson, Julio Antonio, Susie Arias, Gustavo Araújo, Yolanda Bech, José Bedia, Cándido Bido, Hugo Bilbao, Trixie Briceño, Milner Cajahuaringa, Coqui Calderón, Leonora Carrington, Francisco Castro Leñero, Luis Cienfuegos, André Cypriano,  Elba Damast,  Jesus Desangles, Helena De La Fontaine, Isabel De Obaldía, Juan Downey, Alberto Dutary,  Sandra Eleta, Gonzalo Endara Crow, Ignacio Esplá, Eric Fajardo, Nancy Friedemann,  Arturo García Bustos, Teresa Icaza, Jorge Iberlucea, Iraida Icaza, Graciela Iturbide, Mónica Kupfer, Wilfredo Lam, Lucette Laribe, Arturo Lindsay, Oswaldo de León Kantule, Roberto Lewis, Abigail Lucien, Jorge Ruiz Melgar, Rafael Martin, , Roberto Matta, Luis Mendez, Manuel Mendive, Cisco Merel, Leslie Milson, Eduardo Moll, Darién Montañez, Rodolfo Opazo, Ernesto Ortiz, Cecilia Paredes, Gisela Quintero, Jhafis Quintero, Juan Antonio Roda, Alfredo Sinclair, Rufino Tamayo, Amalia Tapia, Eloy Tarcisio, Guillermo Trujillo, Fernando Toledo, Tabo Toral, Emilio Torres, Aristides Ureña Ramos, Julián Velásquez, Oswaldo Vigas, Alicia Viteri, Rolando Ixquiac Xicara, Julio Zachrisson

Artistas invitados:
Francis Alÿs, Ana Lasso, Valentina Desideri, Alfredo J. Martiz J., Naufus Ramírez-Figueroa, Marc Vives

Equipo curatorial:
Juan Canela
Jennifer Choy
Liz Lasso

Esta es una historia que se ha contado muchas veces, pero que no todo el mundo conoce. Una historia que son muchas historias. Esta exposición conmemora los 60 años del MAC Panamá, que son ya en realidad 61. Pero eso es parte de las historias mismas.

A través de obras de la colección y materiales de archivo del museo, además de algunas intervenciones de artistas invitados, este proyecto quiere acercarse a esas distintas historias que componen el MAC, deteniéndose en algunos de los momentos, exhibiciones, eventos, y encuentros más importantes de estos 60 años. Pero también comprender las vulnerabilidades de una institución como ésta. Penetrar su compleja naturaleza, indagar su pasado para ubicarnos en el presente y proyectarnos hacia el futuro. Algo así como hacer un ejercicio de introspección compartido con todo aquello que nos conforma y nos rodea.

Durante los últimos meses se han realizado una serie de entrevistas con distintas personas que a lo largo de estos años y en diferentes periodos, han estado cerca del museo por un motivo u otro; ya fuera como parte del equipo, la junta directiva, artistas o como público visitante. Estas conversaciones, en formato podcast disponibles para su escucha, nos han servido de guía para hoy presentarles esta exposición.

Lejos de querer ser un proyecto historiográfico, o una lectura detallada de los hechos, los abordamos a partir de un acercamiento curatorial polifónico, tomando las obras de los artistas presentes en la colección, y los elementos a su alrededor, como los protagonistas principales del proyecto. Entramos a la materia institucional a través de recuerdos, momentos y afectos de personas cercanas al MAC, así como de nuestras propias experiencias, haciendo un ejercicio de apertura que nos permita mostrar, compartir y revelar lo que somos.

Algunos elementos clave en la historia del museo son protagonistas en la muestra. Los orígenes, la arquitectura y el emplazamiento, la colección, el archivo, el taller gráfico o las bienales sirven también para comprender esos escenarios, momentos y proyectos que han ido construyendo el MAC. Sin generar secciones estancas, ayudan a articular la selección de obras de la colección que, desperdigada junto a los materiales de archivo por las distintas salas del museo, ofrece una panorámica de su diversidad, compartiendo las aproximaciones de los artistas a las realidades de las últimas décadas, y la relación del museo con éstas. El montaje expositivo trata de compartir sin rodeos, mostrar las costuras, abrir con honestidad las entrañas de la institución.

A esta selección de obras y archivo, que nos invitan a recorrer los momentos más significativos del museo, se añaden las invitaciones a varios artistas que realizan nuevas producciones, intervenciones o performances en diálogo con la historia o la naturaleza del MAC. Así Alfredo J. Martiz J. (Panamá, 1980) indaga en los materiales del archivo del museo para, mezclándolos con sus propias fotografías, aludir a lo vulnerable, lo transitorio de la existencia, la trascendencia de un lugar específico, o la importancia de la comunidad en la construcción de institucionalidad; Megan Carrera (Panama, 1995) y Ana Lasso (Panamá, 1996) crean una instalación que, desde la escritura y el dibujo, abordan la materia institucional desde lo poético; Marc Vives (Barcelona, 1978) realiza una performance en la que toma como punto de partida la arquitectura del museo, pero también un poso intangible conformado por sesgos de historia, relatos, vivencias y otras conexiones de carácter ancestral y simbólico; Naufus Ramírez-Figueroa (Guatemala, 1978) realiza una serie de obras basadas en la forma de varias especies de plantas de Anthuriums que habitan en la antigua Zona del Canal de Panamá, actuando como una meditación sobre la geometría de las hojas y cómo, al amarlas y coleccionarlas, los humanos han hecho desaparecer muchas en la naturaleza; El MAC Rebelde es un proyecto de Humberto Vélez (Panamá, 1965) en colaboración con Bolívar Sánchez, Maritza Sánchez, Mariel Fuentes y La Banda Internacional El Hogar que toma forma de desfile, concierto, coreografía, declamación y oratoria en torno a los sueños y aspiraciones de los artistas, gestores, benefactores y curadores que han ido construyendo la colección y la identidad del museo; Valentina Desideri (Roma, 1982) invita a artistas, profesionales, trabajadores, activistas o cualquier usuario del museo interesado en cuestionar y especular sobre su misión, el uso de sus recursos materiales e inmateriales, y su función social a ser parte de un grupo de estudio, y que tomará después la forma pública de una performance que indagará sobre el futuro de la institución.

Una selección de los materiales de archivo están también disponibles en la exposición para consulta,  estudio y activación por parte del público, ofreciendo un espacio de reunión que permite experimentar en primera persona. Las historias del MAC son las historias de las personas que han sido parte de los distintos equipos a lo largo de los años, sus juntas directivas, los donantes y voluntarios, las y los artistas que han mostrado y han trabajado con el museo, así como el público que ha visitado las más de 700 exposiciones que se han sucedido a lo largo de los años. El archivo es un organismo vivo, un acervo hecho de documentos, imágenes, y recuerdos que nos ayuda a comprender quién somos, pero también a imaginar cómo podemos ser en el futuro.

Apuntaba Roxanna Caín en un escrito de 1986 con motivo del 25 aniversario de la institución como el pequeño gran museo de Ancón había dado pasos de gigante desde su fundación. A lo largo de las siguientes décadas, el MAC ha afianzado su capacidad de resiliencia, su valentía en cuestiones importantes, o ser un espacio seguro para conversaciones complejas esenciales para el avance social. Continuemos dando pequeños pero firmes pasos, que nos permitan avanzar hacia un futuro acorde a los desafíos de nuestro tiempo.

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Documentación: Alfredo J. Martiz J. / @ajmartizj 

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